Fiestas patronales de San Francisco de Asís
Cájar, el municipio donde se ubica Hotel La Garapa, celebra cada año sus fiestas patronales en honor a San Francisco de Asís. Estas fiestas, que se celebran durante el mes de octubre, son una de las principales tradiciones del municipio y atraen a visitantes de toda la comarca.
Origen y tradiciones
Las fiestas patronales de Cájar se celebran desde el siglo XVIII. En sus inicios, estas fiestas eran de carácter religioso, con misas, procesiones y actos de devoción al patrón del municipio. Sin embargo, con el paso del tiempo, las fiestas fueron incorporando elementos lúdicos y festivos, como la verbena, los conciertos y las atracciones de feria.
Hoy en día, las fiestas patronales de Cájar son un evento festivo y popular que se celebra durante varios días. El programa de fiestas incluye actos religiosos, como la misa mayor y la procesión del patrón, así como actos lúdicos y festivos, como la verbena, los conciertos, las atracciones de feria, las competiciones deportivas y las actividades culturales.
Hechos destacados
A lo largo de su historia, las fiestas patronales de Cájar han vivido momentos destacados. En 1992, las fiestas fueron declaradas de Interés Turístico Provincial. En 2001, la imagen de San Francisco de Asís fue coronada canónicamente. Y en 2012, las fiestas fueron declaradas de Interés Turístico Andaluz.
Debes venir a las fiestas patronales de San Francisco en Cájar
Las fiestas patronales de San Francisco en Cájar son un evento festivo y popular que reúne a vecinos y visitantes de toda la comarca. Estas fiestas son una oportunidad para disfrutar de la tradición, la cultura y la gastronomía de Cájar.
Algunos datos curiosos
La imagen de San Francisco de Asís que se venera en Cájar es una talla de madera del siglo XVI.
La tarasca, un dragón gigante que recorre las calles del pueblo durante las fiestas, es una tradición que se remonta al siglo XIX.
La verbena de las fiestas patronales es una de las más concurridas de la comarca.
Las fiestas patronales de Cájar son un momento ideal para degustar los platos típicos de la gastronomía local, como las migas, el gazpacho o el ajoblanco.
